Historia de un blog

Yo tuve un blog. He tenido muchos, en realidad. Pero ese blog, al que podría llamar EL BLOG, fue solo uno. Era un blog sobre todo y nada al mismo tiempo, pero me gustaba escribir en él.

Era un blog muy similar a este, por lo variopinto de sus entradas, pero abierto en el año 2007 o 2008 (si no me falla la memoria). Estaba cursando la carrera y, por aquel entonces, todavía tenía ilusión por hacer divulgación geológica. Llegué a organizar uno de los carnavales científicos, tan de moda en aquellos tiempos. Escribí varias entradas sobre sitios interesantes geológicamente que se podían visitar fácilmente. Incluso una ruta por El Retiro, para ver diferentes tipos de rocas utilizadas en la construcción, que fue un proyecto para la asignatura de rocas industriales.

Tenía una serie de entradas para hablar de los sitios donde había comido o dormido, que me servían para recomendar (o no) los lugares que había visitado. Hasta daba puntuaciones, pero, en vez de estrellas, utilizaba martillos de geólogo.

Escribía, también, sobre los libros que me habían gustado. Pero no recuerdo si escribí sobre algo más o si llegue a escribir ahí algún relato. No me sorprendería, pero por más que hago memoria... ¿Mi idea del fanzine Keuper para la divulgación geológica la presenté en este blog? ¿O quizás en el webcómic?

Un día se me ocurrió compartir mis apuntes de la carrera. Debió ser mientras estaba tercero. Según cursaba las asignaturas y terminaba de preparar mis apuntes, los subía en mi blog. Hasta quinto de carrera, creo que del máster no llegue a colgar ninguno.

Un día, mientras hacía mi doctorado, recibí un correo al blog. Era un correo en el que me amenazaban con emprender acciones legales por tener subidos mis apuntes al blog. El email estaba firmado por un vicedecano de aquel momento. En un principio, pensé en no hacer nada. Sabía que mis apuntes era todo un éxito y que muchos estudiantes los usaban durante la carrera. Sin embargo, reconozco que, al final, me acojoné. Ver el correo todos los días en mi bandeja de entrada, me producía desasosiego. Así que, borré el correo y deshabilité la sección de los apuntes en el blog. Algo que tampoco iba a impedir que los estudiantes los utilizasen, porque estaban copiados en todas las plataformas de apuntes y los estudiantes se enviaban los apuntes por email. Pero el daño ya estaba hecho.

No recuerdo si volví a escribir en el blog tras aquel email, pero, unos meses después, borre el blog. Y, como siempre, sin hacer copia de seguridad.

Aquello debió ocurrir en el año 2013 ó 2014. No lo recuerdo. Aunque seguí con el blog de citas (un commonplace book digital), pero sin escribir nada propio. No volví a tener un blog en el que escribir hasta el año 2022, este blog, que ha ido cambiando de plataforma hasta llegar a Escritura Social. Pero sigue sin ser un blog como aquel, o, al menos, no lo siento así, quizás por eso, este blog no tiene todavía nombre. Blog de Doclomieu no es un buen nombre, ni lo puse para ser el definitivo (solo para completar el paso de registro del blog). Quizás algún día este blog tenga un nombre real y lo sienta como un buen sustituto de aquel blog. Aunque no creo que vaya a ser capaz nunca de escribir con cierta regularidad.


El hashtag de hoy es #Reflexiones


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Lechuza apoyada sobre una estilográfica rodeada por una corona de olivo.