La “IA”, el cambio climático, y dos huevos duros

(Traducción un poco acelerada de un email que acabo de escribir en inglés)

No faltan informes que tratan de justificar el uso de la “IA” para el bien social. Por ejemplo, este informe de McKinsey titulado “IA para el bien común: Mejorando vidas y protegiendo el planeta”.

Sin embargo, sistemáticamente encuentro que estos informes ofrecen argumentaciones bastante endebles. De ese mismo informe (traducción asistida por LibreTranslate, énfasis mío):

Las aplicaciones actuales de la IA son aplicables a todos los ODS [Objetivos de Desarrollo Sostenible], incluyendo modelado de proteínas, detección de medicamentos, diseño de vacunas, la asignación eficiente de ayuda y servicios públicos, la solución de problemas de cadena de suministro, optimización de última milla para suministro de alimentos en geografías remotas, pronóstico de los efectos del cambio climático a largo plazo, alerta temprana para los desastres naturales, y la aportación de conocimientos especializados a los trabajadores de ayuda humanitaria.

Por lo tanto, el potencial de la “IA” parece ser mayormente proporcionar mejoras incrementales a nuestras capacidades para lidiar con el cambio climático. Parece darse por sentado que el cambio desastre climático es algo inevitable.

Otra más, esta vez de Google: “¿Puede la IA ayudar a resolver la crisis climática? Por qué la innovación digital es crítica para la transición a un futuro bajo en carbono”

(Archivado dentro de “Marketing Strategies”, ojito)

La IA representa una de las mejores esperanzas, ya que la investigación muestra que podría tener un efecto transformador escalando tecnologías probadas para reducir las emisiones globales hasta un 10% para 2030.

Una reducción del 10 % para 2030 está muy lejos de lo que se necesita. La ONU dice:

En los escenarios que evaluamos, limitar el calentamiento a alrededor de 1,5°C (2.7°F) requiere emisiones globales de gases de efecto invernadero a pico antes de 2025 a más tardar, y reducirse un 43% en 2030;

¿Cómo puede ser que las grandes tecnológicas puedan hacer afirmaciones así que rara vez son cuestionadas o puestas en contexto por la prensa?

Más abajo el mismo informe de Google dice:

Más abajo Google dice:

Nuestro informe Digital With Purpose muestra que si bien las tecnologías digitales cerrarán la brecha en algunos de los 2030 objetivos, aproximadamente un tercio de los objetivos se deteriorarán aún más, incluso después de aumentar la adopción tecnológica.

Estamos al principio de pensar en lo que la IA puede hacer para ayudar al cambio climático. Por ejemplo, si usted mira a los equipos de sostenibilidad de muchas grandes empresas de comercio público pasan una cantidad significativa de tiempo en la presentación de informes sobre el clima.

De nuevo, la “IA” como una herramienta para hacer informes más rápido sobre cómo el planeta se muere. Soluciones, pocas.

En resumen: la “IA” tiene, en el mejor de los casos, el potencial de reducir un 10% las emisiones de CO2 para 2030 (insuficiente) y ayudarnos a ser ligeramente más eficientes a la hora de asignar recursos para la gestión del desastre.

¿A qué precio?

Algunos datos:

Objetivo de emisiones de Microsoft vs la cruda realidad

Y ojo, no se trata sólo de emisiones:

¿Y qué hay de la fabricación de chips?

Y eso por no hablar del cobalto, como lamentaba Mario Mimoso en LinkedIn hace pocos días.

He tratado de enlazar las fuentes primarias en todos los casos. Si tienes tiempo y ganas puedes ir a cada una de ellas.

En conclusión: la “IA” requiere cantidades ingentes de energía, cantidades ingentes de agua, cantidades ingentes de materiales primarios que se extraen de zonas en conflicto... y todo esto para escribir informes un poco más rápido.

No necesito escuchar ni una vez más que la “IA”, o que cualquier otra tecnología, va a resolver por sí sola el cambio climático. Necesitamos un cambio sistémico.

Mientras tanto, la “IA” seguirá adelante en su guerra contra los trabajadores, su verdadero beneficio para las empresas.

Escrito por un humano, no por una IA