¿Lo que queremos es lo que necesitamos?

Llevo mucho tiempo hablando con mi buen amigo Adrian Perales sobre la importancia de conoceros a nosotros mismos, no es sencillo, porque lo que suele suceder es que se confunde lo que se quiere, la ambición o mejor dicho «lo que se cree necesitar» con lo que se necesita en realidad.

Llevo más de un año analizándome, pensando, eliminando proyectos superficiales, dejando de ser tonto en lugar de buena persona (esto da para varios temas aparte) y quedándome con lo mínimo imprescindible.

Esta semana ha ocurrido un acontecimiento familiar que por más esperado que fuese no es menos doloroso. Toda la rutina diaria, las necesidades familiares, mis propias necesidades han cambiado. Todo lo que creía se ha esfumado, y esta semana la he tenido para replantearme toda mi vida. Se dice pronto.

La cuestión es que yo ya había reducido mucho mis proyectos. Llevo tan solo Mastodon como red social, escritura social para estas pequeñas reflexiones que me gusta compartir y dos canales de YouTube: uno sobre literatura y otro sobre mi aprendizaje de dibujo… Mientras escribo una novela.

No es poca cosa, la cuestión es lo que comenté en el artículo de ayer, el nivel de exigencia que nos ponemos. Me había impuesto publicar un vídeo cada semana en los canales… Dos vídeos a la semana, ocho al mes, teniendo familia, trabajo, aficiones….

Yo pensaba que es lo que quería, lo que necesitaba. Tener canales con buena periodicidad, contenido específico…. Y ahora veo que no, es lo que yo CREÍA que quería, lo que CREÍA que necesitaba. Esta semana sin embargo paseando con mi mujer y la perra por el parque, el río… he visto lo que es la felicidad.

La felicidad (en mi caso) es simpleza, tranquilidad. Medirse a uno mismo, meditar lo que en realidad uno quiere hacer y no lo que queremos hacer pensando en un rédito social, en un crecimiento para ver hasta donde podemos llegar. Y eso no es sano.

Lo que yo QUIERO es escribir, escribir mis novelas, hacer dibujos. Eso es lo que yo quiero y me siento reconfortado haciendo y viendo que mejoro.

También es cierto lo que me ha comentado Adrian que me conoce en ocasiones mejor que yo mismo. Tu cabeza va a mil Dani y necesidad más. Por lo tanto es cierto que necesito los canales de YouTube, pero a otro ritmo, quizá un par al mes en cada canal en lugar de cada semana.

Aunque hoy no me apetezca grabar es cierto que el mes que viene igual me apetece volver a grabar cada semana…

Por lo tanto, separemos lo que creemos necesitar con lo que sí lo es.

Y no os equivoquéis, lo más normal es confundirlo.